¿Tu verdad? No, la Verdad,

y ven conmigo a buscarla.

La tuya, guárdatela.

(Antonio Machado)

LOS NIÑOS: CARNE DE CAÑÓN

Al parecer, ya no basta con los millones de niños que son asesinados antes de nacer, o a poco de haber nacido, o a los millones que son conducidos a vida vegetativa como "óvulos fecundados" u otros eufemismos con que se quiere disimular la manipulación de la vida humana con distintos fines. También la información de prensa nos recuerda la enorme hipocresía que explica la presencia de niños armados para la guerra cuando los mismos países signatarios de tratados sobre "derechos humanos" los arman para el "negocio" de la guerra.

Nada puede extrañar a los argentinos, que han dado rango constitucional a los derechos y garantías que contienen esos tratados, pero que son "juzgados" sobre su observancia por agentes del único país que no ha ratificado la Convención sobre los Derechos del Niño ni otros tratados que se refieren a los "derechos humanos" que dicen defender: Estados Unidos de América.


Unicef estima en 100 mil los niños soldados en África

Estimó entre 250 y 300 mil los niños soldados en el mundo, un tercio de ellos en África.

15/02/2012 10:25
Agencia Télam




..El Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef) estimó entre 250 y 300 mil los niños soldados en el mundo, un tercio de ellos en África, donde son reclutados por grupos armados.



El asesor del ente internacional para la protección de los menores en +frica Occidental y Central, Joachim Theis, dijo que la República Democrática del Congo (RDC) acumula el mayor número de niños armados, asociado al conflicto que vive hoy esa nación.



Durante 2011, unos 1.900 niños, entre ellos 266 niñas, fueron desmovilizados en la RDC, otros 2.200 en la República Centroafricana y 360 en Chad.



Según Naciones Unidas en el continente existen más de 100 mil niñas y niños involucrados "voluntariamente" o por la fuerza en conflictos bélicos, más en Uganda, Liberia, RDC y Sudán.



Investigaciones del ente mundial indican que muchos de esos pequeños no están dentro de un ejército oficial, sino bajo el mando de grupos armados irregulares, según despacho de Prensa Latina.



Muchos son incorporados por la fuerza, y a otros la vida no les da otra oportunidad que enrolarse en esos conflictos para subsistir e, incluso, ayudar a la manutención de su familia.